viernes, 31 de julio de 2015



Reproducción Sexual de las Plantas

     La reproducción consiste en la capacidad de los seres vivos de producir seres semejantes a los existentes, pues el fin de todas las especies es perpetuarse en el espacio y en el tiempo. Aun así hay que distinguir entre reproducción y multiplicación que es sólo un aumento de la población cosa que no tiene porqué suceder así en la reproducción.

    Existen dos tipos de reproducción: vegetativa o asexual y sexual o generativa. La reproducción asexual no implica la unión de células y en ella los individuos se desarrollan para dar otros idénticos a ellos. La reproducción sexual, de la cual se especificará detalladamente en este espacio, implica la unión de células germinales especiales, los gametos.



LA FLOR: Es el órgano sexual de la planta. 

Partes de la flor:

- Sépalos: son las hojas de color verde en la parte más externa. El conjunto de sépalos forma el cáliz. – Pétalos: hojas grandes, brillantes y coloridas que se encuentran en el interior de los sépalos. Envuelven las estructuras reproductoras. El conjunto de pétalos forma la corola. – Androceo: órgano reproductor masculino. Está compuesto por los estambres. Cada estambre consta de un filamento y una antera, la cual contiene en su interior los granos de polen (gametos masculinos). – Gineceo: órgano reproductor femenino. Está formado por uno o más carpelos. Cada carpelo consta de ovario (en su interior está el óvulo o primordio seminal), estilo y estigma.

    POLINIZACIÓN: consiste en el transporte del polen (que contiene los gametos sexuales masculinos) desde la antera (parte del órgano reproductor masculino) hasta el estigma (parte del órgano reproductor femenino). Este proceso puede tener lugar en una misma flor (autopolinización) o entre flores de distintas plantas de la misma especie (polinización cruzada). Los agentes polinizadores que existen son: - El viento: polinización anemófila. Las flores suelen ser pequeñas, poco llamativas y sin aroma. Producen grandes cantidades de polen fácilmente transportable hacia otras flores. - Los insectos: polinización entomófila. Las flores se caracterizan por sus colores brillantes, por su aroma y por la producción de néctar, del cual se alimentan los insectos. Estos caracteres atraen los insectos, y los granos de polen que suelen tener ganchos se enganchan a éste cuando visita una flor y así transfieren el polen a la siguiente flor que visitan. - Las aves - El agua. 

    FECUNDACIÓN La fecundación es la fusión de los gametos (células sexuales) masculinos y femeninos para producir un zigoto (embrión). Después de la polinización, los gametos masculinos que están dentro de los granos de polen que están en el estigma, se unen al gameto sexual femenino que está dentro del ovario de la flor y se formará un zigoto que crecerá hasta convertirse en el embrión de la planta. La parte externa del primordio seminal forma una cubierta (cubierta de la semilla) y la parte externa del ovario forma una capa llamada pericarpio alrededor de la semilla. El conjunto del pericarpio y la semilla formarán el fruto.

     EL FRUTO: es el ovario fecundado y maduro que contiene la semilla, que es el óvulo fecundado. Su principal función es la protección y dispersión de las semillas

     En botánica, el fruto es el órgano procedente de la flor, o de partes de ella, que contiene a las semillas hasta que estas maduran y luego contribuye a diseminarlas. Desde un punto de vista ontogénico, el fruto es el ovario desarrollado y maduro de las plantas con flor. La pared del ovario se engrosa al transformarse en la pared del fruto y se denomina pericarpio, cuya función es proteger a las semillas. 


     El fruto es otra de las adaptaciones, conjuntamente con las flores, que ha contribuido al éxito evolutivo de las angiospermas. Así como las flores atraen insectos para que transporten polen, también muchos frutos tratan de atraer animales para que dispersen sus semillas. Si un animal come un fruto, muchas de las semillas que éste contiene recorren el tracto digestivo del animal sin sufrir daño, para después caer en un lugar idóneo para su germinación. Sin embargo, no todos los frutos dependen de ser comestibles para dispersarse. Otros, se dispersan aferrándose al pelaje de los animales. Algunos forman estructuras aladas para poder dispersarse con el viento. La variedad de tipos de frutos que han desarrollado las angiospermas a través de su evolución les ha permitido invadir y conquistar todos los hábitats terrestres posibles.

     LA SEMILLA: es el embrión de la planta que ha alcanzado la madurez y se encuentra en estado de “vida latente”. Puede permanecer en este estado durante mucho tiempo, según la especie. Cuando la semilla encuentra las condiciones ambientales adecuadas, germinará. Está formada por tres elementos: 

- Embrión: Es una plantita en miniatura, en estado de vida latente o letargo. 

- Endospermo: tejido de reserva alimentario de la semilla. 

- Tegumento: cubierta exterior que actúa de defensa y evita la pérdida de agua de la semilla. 

     La semilla presenta una propiedad importante que está relacionada con el tipo de fruto y su forma. Esta propiedad le capacita para poder asegurar la supervivencia de la especie. A veces es difícil el crecimiento de la planta joven bajo la planta madre, por ello las semillas presentan mecanismos de dispersión que aseguran que algunas semillas encuentren condiciones adecuadas para germinar y crecer. Actualmente las semillas representan la manera de conservar las especies para el futuro, mediante los Bancos de Germoplasma, las instituciones públicas y los jardines botánicos. Se ha construido un enorme banco de germoplasma en el polo norte donde se han depositado las semillas tanto de plantas agrícolas como las más amenazadas y que proceden de todos los países del mundo. El banco global de germoplasma es el intento de garantizar para el futuro la flora del planeta así como las plantas agrícolas.



     GERMINACIÓN: se produce cuando brotan las semillas. Las semillas constan de un embrión y de un depósito de nutrientes (endospermo) envueltos por la testa (cubierta). Después de la dispersión desde la planta madre, las semillas se secan y entran en un periodo de vida latente. Cuando las condiciones ambientales son favorables (humedad, oxigeno, calor…), se produce la germinación. En un principio, la semilla absorbe agua, el embrión empieza a utilizar la reserva de alimento y la radícula se hincha perforando la testa. A partir de aquí empieza el crecimiento de la nueva planta, desde que comienza la germinación hasta que la planta logra la completa independencia de los nutrientes almacenados en la semilla, la planta recibe el nombre de plántula.



No hay comentarios:

Publicar un comentario